Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé – Paraguay

Sebastián Scavone. (s.f). Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé. Pinterest.

Caacupé es como un estuche de esmeralda que guarda una preciosa joya: Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé, hasta la cual no cesan de llegar los peregrinos de toda la república, en busca de consuelo y curas de sus males del espíritu y del cuerpo, o a pagar su deuda por una u otra salud recuperada.

En automóviles, carretas, a caballo y de a pie, todos los Paraguayos hemos ido siquiera una vez en nuestras vidas a visitar a nuestra Virgencita de Caacupé en busca de consuelo o para agradecerle alborozados sus divinos bienes.

La Leyenda del Indiecito Convertido

Nos cuenta la historia que corría el año 1600, cuando cierta mañana un grupo de indios Mbayaes perseguía a un guaraní con intención de darle muerte, tal vez por pertenecer a otra tribu dominante del área, o tal vez porque el indio guaraní convertido al cristianismo y era feligrés de los franciscanos, a los que los Mbayaes temían tanto como al diablo.

Completamente acorralado como estaba y desesperado por la suerte mortal que le esperaba, el indiecito convertido se escondió detrás de un gran árbol que le parecía protector. Agazapado y tembloroso, se le iluminó de pronto el recuerdo de la Inmaculada Concepción, que era la Virgen de su predilección. Entre súplicas y suspiros, entre miedo y esperanzas, le prometió a la Reina de los Cielos que, si lo libraba de sus injustos y feroces enemigos, le haría una imagen de la misma madera de aquel árbol.

Milagrosamente, los Mbayaes no lo encontraron en aquel monte y al caer la noche se vieron obligados a volver a sus tolderías. El indiecito guaraní se vio luego libre……y no vivió más que para cumplir su promesa.

Esperando un prudencial tiempo, el guaraní vuelve al árbol protector, ya con sus primitivas herramientas. Desgajó de aquel tronco la madera necesaria para su propósito, puso a secarla, y pacientemente, con todo el arte de sus manos y el fervor de su alma, se puso a esculpir dos estatuas de la Virgen: una, más grande, destinada a la Iglesia de Tobatí, cercana al lugar, y otra, más pequeña, para su devoción particular.

Catedral de Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé

Es un edificio religioso que funciona como la catedral católica de la ciudad de Caacupé, una ciudad en el país sudamericano de Paraguay.

Es la sede de la Diócesis de Caacupé (Dioecesis Caacupensis) que fue creada como prelatura territorial en 1960 y fue ascendida a su actual estatus en 1967 mediante la bula “Rerum catholicarum” del papa Pablo VI.

El Santuario de la Virgen de Caacupé es una basílica católica en Paraguay que fue inaugurada el 8 de diciembre de 1765 y se convirtió en un lugar de peregrinación para muchos creyentes locales. El nombre Caacupé deriva de la palabra guaraní ka’a kupe, que significa “detrás de la hierba” o “detrás del bosque de hierba”. Caacupé es considerada la capital espiritual de Paraguay porque alberga el santuario más grande del país.

Caacupé, es un municipio y ciudad de Paraguay. Es la capital del Departamento de Cordillera y está situada al oeste de dicho departamento; además, la Cordillera de los Altos atraviesa el municipio. Se encuentra ubicada a 54 km de la ciudad de Asunción, la capital del país. Está asentada en la cumbre del cerro homónimo, desde la cual se puede visualizar el hermoso lago Ypacaraí. Es una ciudad muy acogedora rodeada de valles verdes y cerros. El distrito está dividido en 15 barrios y 17 compañías.

Catedral de Nuestra Señora de los Milagros (Caacupé). (13 de julio de 2020). En Wikipedia

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Oración a Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé

Santísima Virgen María de los Milagros de Caacupé, Señora y Madre nuestra, te saludamos con veneración de hijo, y te suplicamos que tu amor maternal nos acompañe, nos ayude y nos proteja.

Tú eres el faro de esperanza de los que aman a Dios. Pedimos, Señora y Madre nuestra por los que sufren, por los pobres, por los enfermos, por los que buscan trabajo, por los ancianos, por los jóvenes, por los niños, por los padres y madres de familia, por los hogares con muchos hijos, por las familias desunidas, por la paz, el pan y el trabajo en nuestra patria

Amén.